Paris:
Lla cosa empezaba bien, había olvidado imprimir mi hoja de embarque y los de ryanair me hacían pagar 40 euros de más.
No importaba. Estaba demasiado contento con coger una semana de vacaciones en París como para que eso me afectará.
Una vez en Paris vino a recogerme Ascend, una apretón de mano y un intenso abrazo anunciaban lo que sería una magnifica semana.
Ascendya había planificado un poco la semana y le parecio que una buena idea para ese jueves noche era una fiesta de erasmus. A mí se me ocurrió que si antes de salir hacía cualquier fiesta, durante esa semana, nos tomabamos tres chupitos de tequila, la cosa aun podría ser mejor.
Cenamos, nos tomamos un par de copas, los tres chupitos y venga palante. Antes de las 12 estábamos en la fiesta. En París se sale pronto.
Ascend me había advertido de dos cosas:
1- Que las copas eran caras.
2- Que a las parisinas le iban los españoles.
Las dos eran ciertas.
Esa noche fue tranquila. Estuvo bien como precalentamiento. Ascend se lio unas cuantas, a mí me entraron otras tantas y pude intuir que en París había mucho cerdeo.
Volvimos a nuestro castillo. El illo puta de Ascend se había tirado seis meses viviendo en un piso de unos 200m en uno de los mejores barrios de París, con servicio de limpieza y planchado incluido, todo, por la patilla. Era espectacular. Una pena que la primera vez que fuese a visitarlo fuese cuando solo le quedaba una semana de estancia en Paris.
El día del viernes me lo pase durmiendo. Ascend volvió sobre las tres de la tarde de su último día de practicas y me despertó. Como por la noche teníamos que celebrarlo, comimos y nos volvimos a acostar.
Cenamos, nos tomamos un par de copas, los tres chupitos y venga palante. Esta vez antes de salir Ascend tuvo una iluminación.
-Esta noche nos vamos a tirar una cada uno y luego nos las cambiaremos.-
Poco me imaginaba yo que esa revelación se cumpliría horas más tarde.
Llegamos a The Cab. La música genial, el ambiente espectacular y las copas caras. Muy caras. Nos daba igual. Eramos jóvenes, con dinero en el bolsillo y con ganas de gastarlo. Sabíamos que podíamos comernos el mundo.
Después de la primera copa estábamos en el centro de la pista bailando la mejor música que había oído yo jamas en una discoteca. No tardaron en acercarse unas parisinas y empezar ha hablar con nosotros. Cinco minutos más tarde Ascend con la suya y yo con la mía. Nos nos estábamos comiendo el mundo aun, pero a unas parisinas sí!
La noche era larga y la música muy buena así que pasamos bastante de las chicas y empezamos a gozarlo en la pista. Bailamos como locos. Algunos nos miraban mal, otras nos miraban mucho y nosotros pasábamos de todo. Esa noche las chicas no importaban. Disfrutábamos el momento.
Aunque a Ascend le pudo su calentón y le echo a una chica. Siguió mis consejos y en cero coma se la estaba liando. Nos invitaron a una fiesta privada en casa de unos amigos de la chica y fuimos.
El piso parecía un corral. Era pequeño, solo tenia una habitación en la que estaba el comedor, las habitaciones y la cocina todo junto y luego había un baño.
Había varios colchones tirados por el suelo. En uno de ellos había una pareja dandose el lote. En el otro Eloi se fue a dar el lote con la suya. Mientras tanto yo me puse a beber cubatas con cuatro chicos, dos de ellos muy gays y una chica.
No se como pero al rato estaba solo con la chica en la mesa. Así que le puse ojitos y me la lleve para el baño. Fue un polvo muy salvaje.
Ascend no tenia condones así que fuimos con las chicas a nuestro piso. Allí nos sentamos en el sofa para tomar unas cervezas. En lo que yo creía era una jugada maestra me lleve a la chica de Ascend a la cocina donde me lie con ella. Al salir, Ascend y mi chica habían desaparecido. Estaban su cuarto echando otro polvo salvaje. Así que pille a la suya y la meti en el mío. La hija de puta era virgen y no quería follar ni chupar. Aunque me hizo una buena paja.
Después volvimos a cambiarlas y cada uno acabo durmiendo con la suya. Así es París… te vuelve un romántico.
Era sábado, por la tarde quede con un amigo que me enseño París. Esa noche era mi cumpleaños y pensaba salir con Ascend a celebrarlo pero el chiquillo estaba malo. Así que salí solo.
Acabe otra vez en The Cab, musicon, conocí algunas chicas y me emborrache un poco. Esa noche volví a casa solo. Pero lo había pasado bien.
El domingo descansamos mucho, vimos una peli y no salimos. Los dos necesitábamos descansar un poco.
El lunes lo pasamos haciendo turismo. París es precio. Me tiene enamorado.
Por la noche decidimos salir. Era lunes pero París no descansa.
Así que nos tomamos un par de copas, los tres chupitos y venga palante.
Primero acabamos en una disco cutre de mierda en la que no había ni dios. Tardamos una copa en irnos y acabar en QUEEN CLUB.
Discotecon, pivonacos, lleno y una música que aunque no tan buena como la de The Cab, era sin duda excelente. Jodidos franceses, que buenos son con la electrónica!
Para no variar en QUEEN CLUB las copas eran caras, la música era buena y las chicas miraban mucho.
Francesas, noruegas, suecas, esa noche hubo de todo. Incluso alguna la tuvimos que compartir a la vez bajo la mirada escéptica de varios chicos de la zona VIP que estaban a pie de pista.
No se si por despiste o pudor no nos llevamos a la chica para acabar el trió en casa. Nos fuimos solos los dos caballeros para casa deseando volver a salir de nuevo al día siguiente.
El martes hicimos más turismo y por la noche estábamos cansados. Así que descansamos con la intención de descargar nuestro último cartucho en nuestra última noche.
Miércoles noche. Al día siguiente no podíamos levantarnos muy tarde pero un miércoles noche en París no puede desperdiciarse. Y no lo hicimos.
Cenamos, nos tomamos un par de copas, los tres chupitos y venga palante. De nuevo en QUEEN CLUB. The Cab, nuestra primera opción estaba cerrado.
Nada más entrar una chica de grandes pechos y un tipito excelente me estaba entrando. Yo no desaproveche la ocasión y empece a tontear.
Algo extraño pasaba con al chica pq me tiraba los trastos pero no se dejaba. Así que me fuí. Tuve varios encontronazos con ella a lo largo de la noche pero no logre hacermela. Creo que tenía novio y le gustaba calentar. Al menos conmigo lo hizo. No se si luego alguna se aprovecho de esa circunstancia. Ascend me dijo que me había visto liándome con alguna. Yo no lo recuerdo. Por primera vez en París el alcohol me había dejado sin memoria.
Ascend tampoco perdió el tiempo y se lió con alguna que otra. De hecho llegamos a casa, solos, y lo primero que hizo fue llamar a una de sus chicas de esa noche.
La llamo, ella decía que estaba en pijama y que no podía venir ya. Ascend me paso el teléfono y me dejo decirle unas dulces palabras a la damisela -Quítate el pijama, ponte la ropa. Sin bragas. Coge un taxi y vente para aquí que te van a dar buena caña.- Volvió a mostrarse negativa en cuanto a lo de venir a esas horas.
Nos fuimos a dormir ya que teníamos que despertarnos en unas cuatro horas, hacer las maletas, recoger el piso e irnos para el aeropuerto.
Mientras hacíamos todos esos que haceres Ascend recibió un mensaje de la chica de las llamadas que decía “dame la dirección. Voy para vuestro piso.”
Como teníamos prisa Ascend no le contesto. A los 20minutos otro mensaje “por favor dame la dirección que quiero ir a despedirme.” Ascend tampoco le contesto.
Llamada.
Era ella. Que quería venir. Ascend le explico que no teníamos tiempo, que no podría ser. Ella insistía. Le colgamos el teléfono.
Siguió llamando y escribiendo mensajes. Parece que las llamadas de dos calientes borrachos a las 7 de la mañana tienen un efecto afrodisíaco en las chicas parisinas.
Ya estábamos en el avión y planeábamos cuando volver. Esta vez dos semanas. Con más dinero. Con más tiempo.
Los dos sabíamos que ese viaje había sido espectacular. No por el musicón, no por haber conocido y disfrutado a Madeon, no por las mujeres, no por la belleza arquitectónica, paisajista y cultural de París.
Sabíamos que había sido un viaje espectacular y especial por que había logrado crear una amistad entre dos personas que no se romperá jamas
SrMeck 